La Ludoteca es un lugar donde
los niños comparten y viven experiencias de tipo social que les permite
relacionarse con iguales y adultos que no sean de su entorno familiar. Para el
niño o niña, supone la separación de la familia y el ingreso en un lugar nuevo.
Los niños de 2 años, necesitan
un período de adaptación. Este proceso, si bien de manera diferente, lo viven
todas las partes implicadas: el niño o niña, la familia y todo el personal del
Colegio y de la Ludoteca, en especial.
Este período de adaptación
debe entenderse como un proceso individual de cada uno de los niños.
¿A qué debe adaptarse el niño o niña?
El niño o niña debe adaptarse
a un nuevo espacio, a nuevos olores y experiencias, al hecho de tener que
compartir, de esperar, de desarrollar su autonomía, de seguir unas pautas
sociales ( reglas y normas), de estar con otros niños ... y también de
separarse de la familia.
Estos cambios pueden comportar
una reacción diferente en cada niño o niña dependiendo de factores personales y
de la reacción de los padres.
Las reacciones ante esta nueva
situación pueden ser diversas:
-
Activas: lloros, miedos, mayor dependencia del
adulto,...
-
Pasivas: inseguridad, inhibición, desconfianza,
rechazo, ...
Un buen trabajo durante los primeros días conlleva una adaptación más
corta y tranquila, y tiene consecuencias positivas durante todo el año.
Debemos tener en cuenta que no todos los niños requieren la misma
atención, pero sí igual cantidad. El hecho de que un niño o niña no muestre
inseguridad no significa que no sufra y no necesite atención.
También debe tenerse en cuenta que el proceso de adaptación del grupo
clase puede durar dos o tres meses. Al cabo de dos o tres semanas, la mayoría
de los niños ya empieza a sentirse a gusto en el colegio, aunque lloren en el
momento de separarse de las familias o en el momento de la recogida al
reencontrarse.